Prográmese para ver la espectacular lluvia de meteoros de las perseidas

María Gracia Batista*

Durante este mes de agosto tendremos la posibilidad de presenciar varios fenómenos astronómicos. Uno de ellos corresponde a la siempre famosa y esperada lluvia de meteoros conocida como 'Las Perseidas', que podrá observarse de mejor manera entre los días 6 y el 24 del mes, siendo el día 12 el momento en que se espera la tasa más alta de estrellas fugaces por hora (entre 50 y 150). Sin embargo, la hora será el mayor reto para los no madrugadores, dado que dicho fenómeno será visible entre la 1 y las 5 de la mañana. 

Las lluvias de estrellas son eventos periódicos, debido a que la Tierra, durante su recorrido alrededor del Sol, cruza sobre los fragmentos expulsados por un cometa en sus pasos anteriores en el Sistema Solar interno. En el caso de las Perseidas, el cometa responsable de estos escombros es 109P/Swift-Tuttle, que nos visitó por última vez en 1992.

Las estrellas fugaces son, entonces, restos rocosos de asteroides o cometas que, al entrar a nuestra atmósfera, se queman por efecto de la fricción, dejando una estela de luz a su paso, con una duración típica de entre 1 y 5 segundos. Desde el momento en que el material ingresa a la Tierra recibe el nombre de meteoro, o bólido, si la roca tiene una masa del orden de toneladas. En la gran mayoría de los casos, estos meteoros no llegan a convertirse en meteoritos ya que se desintegran totalmente antes de tocar la superficie terrestre. 

El nombre popular que reciben las lluvias de estrellas se ve influenciado por la región del cielo en donde mayormente se visualicen sus trazos de luz (conocido como radiante); por lo tanto, en los próximos días se recomienda alzar la mirada a la constelación de Perseo (en dirección hacia el noreste) para poder encontrar a las Perseidas. 

Un aspecto positivo es que la observación de este evento astronómico se puede lograr sin telescopios o binoculares, considerando que los trazos de luz pueden describir varios grados de longitud sobre el cielo, ante la rápida velocidad de los meteoros (por encima de los 50 km/h).

Cuando usamos telescopios, vemos solo una fracción muy pequeña del espacio y, aun si el equipo tiene la función de seguimiento de estrellas, su desplazamiento es más veloz de lo que mecánicamente se puede seguir. Otro aspecto menos favorecedor a tener en cuenta para su observación es que este año los días de máximo número de estrellas fugaces por hora coincidirán con los de mayor brillo de la Luna, contando además con que se trata de la última superluna del 2022, lo cual hará más difícil su detección en el cielo.

Con todo esto, solo nos queda invitar a toda la comunidad a disfrutar de este llamativo acontecimiento, y desear cielos despejados. Estemos atentos y preparémonos para las madrugadas de cacerías de estrellas fugaces. 

 *Coordinadora del Observatorio Astronómico de la Universidad de los Andes